Santa Eulalia des Riu:
Santa Eulalia es uno de los pueblos más
bonitos de la isla, situado en la costa noreste de Ibiza. Con sus 20.000
habitantes es uno de los pueblos más grandes.
Bordeando la costa de Santa Eulalia, podrán
encontrar: una bonita playa de arena blanca y, un largo paseo marítimo que va
desde el puerto deportivo hasta la urbanización de Siesta.
Hay vida durante todo el año, ya que la mayoría de las tiendas y restaurantes
permanecen abiertos, tanto en verano como en invierno. La Calle de los
Restaurantes es, sin duda, la más famosa del pueblo, pues hay todo tipo de
restaurantes.
Debido a sus dimensiones la mayoría de la gente se conoce.
Santa Eulalia incluye otros pueblos como:
(Nostra Senyora de) Jesús, Sant Carles de Peralta, Sanata Eulària des Riu,
Santa Gertrudis de Fruitera y Puig D'en Valls; la mayoría de sus habitantes van
a las zonas rurales para encontrarse con sus familiares y es donde realizan
muchas de sus tradiciones y costumbres.
El municipio presenta una línea costera con
barrancos, cuevas, y playas con arena y aguas cristalinas preciosas; islas
pequeñas, montañas y valles donde predomina la vegetación. El pino es el árbol
que caracteriza a la isla de Ibiza y a la de Formentera, de ahí el nombre
Pitiüsas. Además de la vegetación, también hay edificios históricos y torres
ubicadas de forma estratégica para controlar los ataques piratas que han estado
presentes durante siglos, sobre todo durante la época de Felipe II.
En la playa de Santa Eulalia los visitantes
que quieran más acción, también pueden disfrutar de numerosas actividades
acuáticas, tales como: ir en catamarán, navegar, ir en kayak, hacer windsurf,
bucear, practicar snorkel, etc. Es un lugar ideal para disfrutar de todas las
edades.
El pueblo de Sant Carles de Paralta es famoso
por presentar el mercadillo hippy de las Dalias y no sólo hay uno sino que en
Es Canar también encontramos el de Punta Arabí; vale la pena perderse una tarde
en cada uno de ellos, pues los productos que se ofrecen están hechos a mano y
el ambiente que se respira es de auténtica paz.
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